Valencia (España)

Historia de Valencia


El primer establecimiento humano en lo que hoy es Valencia ocurrió hacia el siglo IV a. C., pero su fundación oficial fue el 138 a. C. por parte de los romanos con el nombre de Valentia, lo que convierte a Valencia en una de las ciudades más antiguas de España.

Con un trazado urbano tradicionalmente latino, la ciudad fue escenario de continuas guerras entre las facciones romanas hasta que finalmente la situación se estabilizó hacia el siglo I y comenzó una etapa de prosperidad hasta la llegada de la decadencia que asoló al imperio hacia el siglo IV, cuando las hordas bárbaras comenzaron a invadir las diferentes provincias.

Edad Media

Para el siglo VI la ciudad quedó en manos de los visigodos que expulsaron a los bizantinos que quedaron con el control de la ciudad hasta que en el año 711 se produce la invasión musulmana, que se apodera de valencia y comienza una nueva etapa de esplendor con la transformación urbana.
 
Ciudad de las Artes y las Ciencias (Valencia - España)
En poco tiempo el florecimiento de la ciudad impulsó una reorganización urbana, cosa que se incrementó durante el reinado de los taifas durante el siglo XI fortificando la ciudad haciéndola impenetrable hasta la llegada del Cid Campeador que retomó Valencia brevemente en 1094, pero después de su muerte, en 1102, la ciudad cayó nuevamente en manos musulmanas.

A partir de ese momento se suscitó una lucha entre los almorávides y los almohades por el control de Valencia.
 
Esta situación se extendió durante casi un siglo hasta que finalmente Jaime I reconquistó definitivamente la ciudad en 1238 manteniendo una tolerancia entre musulmanes, judíos y católicos.

Un siglo después Valencia se vio asolada por la pandemia de peste negra en 1348 y una serie de devastadoras guerras que afectaron gravemente a la ciudad de manera socioeconómica, lo que originó tremendas tensiones entre las distintas comunidades religiosas que se sostenían a duras penas.

Siglo de Oro

El siglo XV está considerado como el momento de mayor apogeo y prosperidad socioeconómica y cultural de Valencia durante la antigüedad, cuando se incrementa su demografía convirtiéndola en la ciudad más populosa de la Corona de Aragón.

Junto con el aumento de la población se produjo una industrialización de textiles de alta calidad siendo la seda el gran puntal exportador convirtiendo a Valencia en un emporio textil en toda Europa.

Así como su desarrollo textil fue un catalizador de emprendimiento y riqueza, también su infraestructura experimentó un impulso sin igual creándose obras de gran envergadura a nivel artístico y cultural como museos, galerías, palacios, pinacotecas y salas de teatro.

El declive de la influencia y la decadencia total

Después del descubrimiento de América, el océano Atlántico se convirtió en la ruta de navegación más importante de todas en detrimento del Mediterráneo.
 
Ayuntamiento de Valencia (España)
A pesar de que la Corona de Aragón estaba emparentada con la de Castilla, la navegación y comercialización de América quedó exclusivamente en manos castellanas en detrimento de catalanes y valencianos, lo que se tradujo en una gran pérdida de influencia socioeconómica.

Esta pérdida ocasionó una grave crisis económica y el inicio de un período muy turbulento para Valencia que se vio envuelta en guerras y conflictos que empeoró su situación.
 
Todo empeoró después de que en 1609 se decide expulsar a moros y judíos de la ciudad, quienes tenían un gran peso e influencia en la economía y la industria, lo que produjo la ruina total de Valencia.

Esta serie de calamidades y malas decisiones empeoraron a lo largo de 100 años con la Guerra de Sucesión, que duró casi una década, y que acabó en 1709 con la autonomía política de Valencia, quedando bajo el control total de Castilla.

Con la llegada del siglo XIX la situación de Valencia empeoró aún más después de la invasión de las tropas napoleónicas en 1809 y que produjo graves daños en la infraestructura de la ciudad, así como una desastrosa situación económica y una tremenda inestabilidad política hasta la expulsión de los franceses.

La Guerra Civil, la recuperación y el futuro

Durante el comienzo de 1840 la ciudad comienza a recuperar algo del brillo de antaño al modernizarse gracias a la instalación de servicios públicos y la inauguración de grandes obras de infraestructura gracias al Ensanche del siglo XIX, que amplió los límites de las ciudades y derrumbó las antiguas murallas medievales originales.

Con la llegada del siglo XX, Valencia despuntaba como una de las principales ciudades de España gracias a su reimpulso industrial, la incorporación del ferrocarril y carreteras para vehículos y la construcción de grandes mercados comerciales.

Sin embargo, la depresión económica de 1929 y la posterior inestabilidad económica se hicieron sentir con fuerza en España, afectando también a Valencia.
 
Catedral de Valencia (España)
Tras el estallido de la Guerra Civil, Valencia se convirtió en la capital republicana y escenificó terribles combates que arrasaron en gran medida la ciudad.

Fue necesario esperar hasta la llegada del llamado Milagro Económico Español para que Valencia nuevamente recuperara su brillo y esplendor a finales de los años 60s, cosa que mejoró aún más después de la llegada de la democracia superando la tentativa golpista de los franquistas de 1981.
 
Durante los siguientes 40 años de democracia, Valencia se posicionó como un polo de desarrollo industrial, turístico, artístico y gastronómico de enorme importancia con grandes retos y ambiciosos planes para el siglo XXI.