De todos los lugares de encuentro que existen en Madrid, sin duda alguna la plaza de la Puerta del Sol es el más famoso y conocido de todos, en ella se encuentra el famoso Kilómetro Cero de las carreteras españolas, el cual fue impuesto durante el año 1950 en la Casa de Correos, el edificio más antiguo de la plaza, y en donde se encuentra el impresionante reloj donde se anuncia el año nuevo.
En sus comienzos, la Puerta del Sol era uno de tantos accesos que rodeaba la pequeña villa de Madrid en el siglo XV, la cual se regía bajo los parámetros urbanos típicos de los arrabales del medioevo a medida que iban creciendo en tamaño, y su peculiar nombre se debe a la representación de un sol que adornaba su entrada con el propósito de indicar la dirección hacia levante.
Durante los siglos XVII y XIX la Puerta del Sol comenzó a ganar más y más popularidad como un lugar natural de encuentro de la capital del reino, pero no sería hasta las primeras décadas del siglo XX cuando adquirió una verdadera importancia como centro neurálgico de las tendencias políticas de la ciudad, en especial los movimientos de izquierda de la Segunda República.
Después de la llegada de la democracia, la Puerta del Sol se caracterizó por ser el lugar usado generalmente para las manifestaciones políticas, las protestas sociales y también como el lugar para celebrar festividades y celebraciones populares, en especial la noche vieja.
Otros de los motivos que la Puerta del Sol suele ser tan popular es la enorme cantidad de monumentos turísticos, entre ellos la popular estatua del Oso y el Madroño, además de la innumerable cantidad de locales comerciales, bares y restaurantes a su alrededor.
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