El Monasterio de San Daniel es un atractivo histórico y natural situado en las afueras de la ciudad de Girona. Este edificio benedictino fue construido en el siglo XII y se encuentra en un entorno idílico rodeado de bosques y ofrece a los visitantes una experiencia única que combina historia, arquitectura y naturaleza.
Se localiza en el Valle de San Daniel, a pocos kilómetros del centro de Girona. Su ubicación tranquila y pintoresca lo convierte en un lugar ideal para aquellos que buscan escapar del bullicio de la ciudad y disfrutar de la belleza natural de la región.
Su iglesia está dedicada a San Daniel y es una muestra notable de la arquitectura románica catalana, pues tiene arcos de medio punto, capiteles tallados y bóvedas de crucería gótica. El interior de la iglesia alberga hermosos retablos y elementos decorativos de diferentes épocas.
Cuenta con un claustro de dos pisos bien conservado, que invita a los visitantes a dar un paseo tranquilo y contemplar la arquitectura medieval. El piso superior es más simple y de estilo gótico (siglo XV), mientras que el inferior es de estilo románico (siglo XIII). Se trata de un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la serenidad del entorno.
El Valle de San Daniel, donde se encuentra situado el monasterio, es conocido por su exuberante vegetación, senderos para caminar y hermosos paisajes. Los visitantes pueden disfrutar de agradables paseos por los bosques, descubrir pequeñas cascadas y disfrutar de la tranquilidad del entorno natural.
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