La Plaza de Toros de Alicante fue inaugurada en el año 1848 y desde ese entonces se encuentra en funcionamiento y está considerada una de las más antiguas que existen en la Comunidad Valenciana.
Para el año 1888 se hace una importante reforma llevando el aforo del coso hasta los 18 mil asientos, algo impresionante para la época ya que en ese momento Alicante solo tenía 16 mil habitantes, lo que resalta en sí la enorme importancia que tenían las corridas de toros dentro de la sociedad del momento.
Como dato curioso, la Plaza de Toros de Alicante solo ha tenido que llorar la muerte de tan solo un torero, cuando en 1911 falleció el diestro sevillano Manuel Díaz corneado por
Faccioso, un toro de la ganadería Flores.
Uno de los grandes atractivos de esta arena es que en su interior alberga la sede del popular Museo Taurino, donde exhiben una importante colección de la Tauromaquia, su historia y sus orígenes. También tiene una interesante exposición permanente de grandes figuras alicantinas del toreo como Vicente Blau, Francisco Antón, José María Manzanares y Luis Francisco Esplá.
Además de la actividad taurina, esta plaza de toros también ha servido de escenario para una gran cantidad de conciertos, eventos políticos y espectáculos deportivos de gran trascendencia, en especial la final de la Copa del Generalísimo de Baloncesto de 1952 y la semifinal de la Copa Davis en 2004.
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