Otro de los museos interesantes y peculiares que posee Alicante es su original Museo de Belenes, situado en una zona estratégica del casco antiguo de la ciudad, y en el que se expone una extraordinaria colección permanente de belenes, muchos de ellos de enorme antigüedad, y que demuestra la importancia que ha tenido esta tradición en toda España y en sus antiguas colonias.
Los belenes, también denominados en otros países como pesebres, son complejos y atractivos dioramas que evocan el nacimiento de Jesús en el pueblo de Belén (de ahí el nombre) e incluyen el portal con la Virgen María, San José y el Niño, casitas, montañas, figuras con ofrendas, pastores con sus ovejas y las figuras de los Reyes Magos.
La tradición de los belenes se remonta al año 1300, cuando la Catedral de Barcelona registró la creación oficial del primer pesebre. Después, en el siglo XVI, durante la Contrarreforma, se impulsó a nivel popular el montaje y realización de los belenes en toda la Europa católica, alcanzando su cenit al sur de Italia durante el período barroco donde se crearon belenes de una belleza extraordinaria. Tras la conquista de América, los españoles llevaron esta tradición al Nuevo Mundo en donde rápidamente se popularizó entre las colonias, las cuales los enriquecieron con sus propios detalles idiosincráticos.
Muchos de los belenes expuestos en el museo han sido obra de grandes artistas que forman parte de la Asociación de Belenistas de Alicante, además de una gran colección de belenes realizados en otras partes del mundo que destacan por su creatividad y originalidad.
Qué ver en Alicante